viernes, 10 de enero de 2014

RESPONSABILIDAD SOCIAL


¡SALUD!
Texto áureo: “Amado yo deseo que tú seas prosperado en todas las cosas, y que tengas salud…” 3 Juan 2
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Puerto Ordaz 10 de enero de 2014. Por Diógenes Pocaterra Requena.


Este texto bíblico, y esta sentencia de la OMS parecen no ser suficientes para que los cristianos y sus iglesias se organicen definitivamente para resolver el desempleo, la pobreza y el hambre.  En Venezuela o en cualquier otro lugar del planeta.

La sentencia o declaración de la OMS fue hecha el año 1948. Y resulta interesante saber que Venezuela como país soberano la acepta y la reconoce como parte de la Constitución el año 1999. Así afirma el artículo 132: “Toda persona tiene el deber de cumplir sus responsabilidades sociales y participar solidariamente en la vida política, civil y comunitaria del país, promoviendo y defendiendo los derechos humanos como fundamento de la convivencia democrática y de la paz social”. 

Parece que salud, o responsabilidad social, fuesen una doctrina herética venida de religiones paganas, o de las corrientes metafísicas de la Nueva  Era. Esto porque la gran mayoría de las denominaciones o no hacen una obra médico misionera llevando consultas y medicinas a los barrios pobres, o el “pentecostalismo” hace creer al pueblo pobre que no hacen falta los médicos, mucho menos una labor social de resolver la pobreza invirtiendo dinero en proyectos socio productivos e invirtiendo menos en la construcción de grandes y suntuosos templos de alabanzas.

Ante éstas incongruencias de las iglesias cristianas que no marchan de acuerdo al don del Espíritu Santo o  labor de sanidad y asistencia social, nosotros los pobres, que por influencia de la revolución “socialista” del gobierno bolivariano de Venezuela,  nos apropiamos de la norma bíblica del diezmo  para exigir una profunda reforma de la doctrina cristiana y de los estatutos jurídicos de cada congregación. Sea que funcionen en urbanismos de la clase media o rica, sea que funcionen en barrios pobres. Nadie puede dudar “ahora”. La Biblia y la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela nos respaldan.

El diezmo para los pobres es parte de la Biblia y no debió ser abolido como ha sido abolido el día de reposo o cuarto mandamiento. Esto es historia aparte.

Si Malaquías 3: 10 `pide “TODOS LOS DIEZMOS” es porque son dos diezmos. Que los pobres no tengan capacidad financiera porque sus salarios perderían aun más su poder adquisitivo es un problema que también debe resolverse y no sesgarse ante él.

El diezmo para los pobres. Deuteronomio 14: 28, 29Cada año los israelitas presentaban un diezmo de sus productos como ofrenda a Dios. Cada tercer año dicho diezmo era distribuido entre los necesitados. Dios aceptaba estas ofrendas hechas a los pobres como una ofrenda hecha a él. El principio detrás de esta práctica fue vigorosamente expresado en una parábola por Jesús (Mateo 25: 31-46), quien dijo: "En cuanto lo hicisteis a uno de estos mis hermanos más pequeños, a mí lo hicisteis"  (Biblia Devocional de Estudio).

Las iglesias en Venezuela deben ser ejemplo para el mundo en esta guerra contra la pobreza puesto que  la mayoría del pueblo no gana lo suficiente para adquirir la canasta básica que, por ejemplo, alcanzó para el mes de noviembre del 2013 Bs 15.000.

¿Existe o no la norma bíblica que nos obligue moralmente a dar y administrar ese diezmo para los pobres? ¿Qué sea administrado por un equipo diferente de la Junta de Iglesia, organizados y con un proyecto social, o benéfico, o cultural, o deportivo, y/o científico? Esto, como podrá reconocerse es tarea de una Fundación que reciba esos diezmos una vez al año, por lo menos, cuando se reciben las utilidades y aguinaldos el mes de diciembre. Y sumar como se sabe las donaciones en dinero o especies que por ley están obligados a dar las empresas privadas y el mismo gobierno nacional o regional.

Venezuela tuvo que llegar hasta el año 1999 para tener una Constitución que determinara el deber patrio de la responsabilidad social de todas las personas (naturales y jurídicas) porque sus líderes sociales, políticos y hasta religiosos, como los sacerdotes católicos que han venido renunciando a sus votos (castidad, pobreza y sumisión al Papa) fueron tomando conciencia del deber social y no encontraron otra vía que la revolución.
La cruz de Cristo significa que el verdadero discípulo obtenga su santidad con sufrimiento y hasta persecución. Pero todo por la causa noble  de llevar protección al desvalido y redimir al pecador llevándolo al pie de la cruz.

Esta es la causa de Cristo. Socorrer al desvalido y al necesitado. Y ya fue establecida la diferencia de misiones para que nadie diga que no hay otra misión que predicar.

“Entonces Pedro le dijo: Nosotros lo hemos dejado todo y te hemos seguido,
qué ¿pues, tendremos?
Jesús respondió: 
–Os aseguro que todo el que por mi causa y por causa del evangelio deje casa, hermanos, hermanas, madre, padre, hijos o tierras,  recibirá ya en este mundo cien veces más en casas, hermanos, hermanas, madres, hijos y tierras, aunque con persecuciones; y en el mundo venidero recibirá la vida eterna. Pero muchos que ahora son los primeros, serán los últimos; y muchos que ahora son los últimos, serán los primeros” (Marcos 10: 29-31. Versión Dios Habla Hoy). El subrayado es nuestro.

Pablo llegó a decir: “Sed imitadores de mí, como yo de Cristo” (1 Cor. 11: 1). El apóstol de los gentiles se obligó a no dar limosnas, sino a exigir que la gente trabajara para que se ganara el pan de cada día: “El que no trabaja, tampoco coma” (2Tes. 3: 9). Se obligó a montar una fábrica de tiendas (Hechos 18: 3). De él es la propuesta cristiana y social de ayuda mutua que es un capitalismo solidario: “Así, por medio de Jesús, ofrezcamos siempre a Dios sacrificio de alabanza; a saber, fruto de labios que confiesen su Nombre. No os olvidéis de hacer el bien y de la ayuda mutua, porque tales sacrificios agradan a Dios” (Hebreos 13: 15, 16).
Lo agradable de este estudio es que existe un apoyo maravilloso para implementar hoy mismo el esquema de la ayuda mutua en nuestra iglesia. La sugerencia de Elena de White que confirma el pedido de Pablo: “Es propósito de Dios que ricos y pobres vivan unidos por lazos de simpatía y de ayuda mutua. Los que disponen de recursos, de talentos y capacidades deben emplearlos en provecho de sus semejantes” (El Ministerio de Curación. 145).

Si usted dispone de recursos, talentos y capacidades debe dar un paso al frente y no esperar que Cristo venga. Se nos ha dicho que debemos estar preparados como si Cristo viniese hoy, pero no dejar de hacer planes y ejecutarlos como si fuésemos a vivir cien años aquí en la Tierra. No hay excusas.
No hay excusas para organizar una Fundación dirigida por cinco miembros de iglesia. Y no hay excusas para pedir el diezmo para los pobres, y salir, también, a pedir ayudas a las empresas privadas y del gobierno. Todo en base de un proyecto que solucione problemas de la comunidad donde esté establecida la iglesia.

Esta Fundación no debe ser un socorrismo de ropa y comida para gente damnificada por desastres naturales, o guerra, sino educativa. Que, además, de dar el pescado, enseñe a pescar. Cuyo objetivo sea el que cada familia resuelva el desempleo, la pobreza y el hambre.

Si en la misma iglesia no surgiese la “persecución” anunciada en Marcos 10: 17-31, donde aparece  el joven rico que conoce los mandamientos, pero rechaza el amar a l prójimo, porque se retira y abandona la oportunidad de obtener tesoro en el cielo, sería falso de toda falsedad la oferta de Cristo de darnos cien veces más si estamos dispuestos a trabajar por su causa y por la causa del evangelio sufrir oposición.

¿Por qué la oposición? ¿Por qué la persecución en la misma iglesia?

Ciertamente que el mundo viola todos los derechos humanos, pero ¿en la iglesia…? ¡SÍ EN LA IGLESIA! Donde miembros y pastores cumplen con la religión hay “persecución”. Existe una omisión institucional al no recoger el diezmo para los pobres y no haber planificado la estructura jurídica del trabajo social de la Fundación.

Es palabra de Cristo que no hay más Buen Pastor que ÉL. Los demás conocen los mandamientos pero se retiran impotentes e incapaces de la presencia del Maestro divino y perdieron la oportunidad de hacer tesoro en el cielo:
“El ladrón no viene sino a hurtar y matar y destruir; yo he venido para que tengan vida, y para que la tengan en abundancia.
Yo soy el buen pastor; el buen pastor su vida da por las ovejas. Mas el asalariado, y que no es el pastor, de quien no son propias las ovejas, ve venir al lobo y deja las ovejas y huye, y el lobo arrebata las ovejas y las dispersa.
Así que el asalariado huye, porque es asalariado, y no le importan las ovejas.
Yo soy el buen pastor; y conozco mis ovejas, y las mías me conocen, así como el Padre me conoce, y yo conozco al Padre; y pongo mi vida por las ovejas” (Juan 10: 10-15).

“ABUNDANCIA: Gran cantidad: haber abundancia de alimentos.2. Riqueza, bienestar: vivir en la abundancia.- Cuerno de la abundancia. Vaso en forma de cuerno lleno de frutas y flores, que simboliza la abundancia y que solía llevar la diosa del mismo nombre. Teoría de la abundancia. Economía. Teoría según la cual los medios técnicos modernos permiten producir  una cantidad de bienes muy superior a los medios de adquisición de los consumidores, circunstancia que hace necesario implantar mecanismos que permitan paliar este desequilibrio” (Diccionario Enciclopédico Larousse 2003).

Ciertamente que hablar de resolver el desempleo, la pobreza y el hambre dentro de la iglesia es encontrar una realidad prevista por Cristo nuestro Señor y Dios. Es la realidad de la escases o pobreza. De la abundancia o riqueza. Es la realidad del problema social, cultural y político. De la realidad de las escuelas teológicas que no forman a los pastores en Economía básica y Desarrollo Socio Productivo. No los preparan para la vida rural, la salida de las ciudades. No en huida, sino en proyecto social de la reforma pro salud.

Plantear una reforma de esta envergadura no tiene ninguna validez si no entramos en la fase previa del reavivamiento para confesar nuestros pecados y pedir poder para lograr la transformación del carácter, el nacimiento del Hombre Nuevo, para que surja una nueva humanidad, amorosa.  Para que se desarrolle la piedad y el amor verdadero entre miembros y pastores. Para así poder ser trasladados cuando Cristo venga en su gloria.

El problema está planteado. La solución es Cristo. ¿Quieres trabajar por su causa y por la causa del evangelio?

ENTREGA AHORA TODO LO QUE TIENES. CAE A SUS PIES, ENTREGA TU VIDA. AFÉRRATE DE SUS PROMESAS Y PIDE. NO SUELTES SU MANO. NO SUELTES SU MANTO. “LUCHA CON EL ÁNGEL PARA QUE HOY MISMO, ANTES QUE AMANEZCA, TE BENDIGA”.
¡GLORIA A DIOS!
¡ALELUYA!
¡BENDITO SEA SU MARAVILLOSO NOMBRE!
¡GRACIAS JESÚS!